A sus 13 años, el ajedrecista logró alcanzar los puntos que lo consagran con el título de Maestro Internacional FIDE, el segundo argentino más joven en conseguirlo. Autodidacta y sin auspiciantes, sueña con ser campeón mundial de su disciplina
El ajedrez argentino se encuentra en un momento de expansión, comandado por dos niños: Ilan Schnaider y Faustino Oro.
A sus 13 años, Schnaider se consagró esta semana como Mestro Internacional tras imponerse en el torneo Master Bella Italia, en la última ronda de encuentros, venciendo al maestro ecuatoriano Carlos Matamoro.
Ilan comenzó el torneo como séptimo favorito y se fue con el título de maestro internacional bajo el brazo. Pero para ello tuvo que trabajar demasiado. Comenzó con cuatro triunfos, uno ante el MI indio Kundu Kaustuv (ELO 2419) y unas tablas ante el MI islandés Aleksandr Domalchuk-Jonasson (2366) en las primeras cinco rondas.
Pero lo complicaron sendas derrotas ante los grandes maestros Artem Omelja (Ucrania, 2434) y Azer Mirzoev (Azerbaiyán, 2429).
Ilan había logrado su primera norma de maestro internacional en el Panamericano Sub 20 de noviembre de 2023, que jugó con 12 años, al quedar tercero con 6,5 puntos en 9 rondas jugadas en Volta Redonda, Brasil.
La segunda la obtuvo en abril pasado, en el torneo ITT organizado por el Círculo de Ajedrez Torre Blanca, histórico club de Almagro y constante formador de talentos como Ilan. Allí el adolescente ganó con 6,5 en 9 rondas.
De esta manera, Schnaider se convirtió en el segundo ajedrecista más joven de Argentina en alcanzar la conquista. Faustino Oro logró la plusmarca mundial a los 10 años y 8 meses) y Schnaider (a los 13 y 6 meses); también en 2024.
Antes habían sobresalido, Pablo Acosta (en 2014, a los 14 años y 9 meses), Alan Pichot (en 2013, a los 15 años y 2 meses), Sebastián Iermito (en 2008, 15 años y 4 meses), Federico Pérez Ponsa (en 2009, 15 años y 7 meses), y Joaquín Fiorito (en 2023, 15 años y 10 meses).
Sueños de un autodidacta
Nacido en Buenos Aires y socio del emblemático club Torre Blanca, Schnaider es estudiante de 1er año del Sistema de Educación a Distancia del Ejército Argentino (SEADEA), que le permite combinar su educación secundaria con su exigente carrera como ajedrecista, que a veces implica emprender largos viajes a torneos en todo el mundo.
“Nos vinimos con Ilan a Italia a buscar el título de maestro internacional. Él es completamente autodidacta y hoy no tiene entrenadores. Sin ayuda alguna, sólo de la familia, hicimos esta apuesta y lo logró”, contó Ram, el padre, a un medio cordobés.
“Desborda de alegría y no para de mandar fotos y el video de la consagración final. Después de tanto esfuerzo, es la emoción del logro cumplido”, concluyó.
El propio adolescente demostró orgullo por su logro: “Estoy muy contento, se trata de un sueño que me acompaña desde hace bastante. Este año me lo propuse como objetivo, hasta colgué un cartel en mi cuarto con este sueño, ¡Y hoy lo cumplí!”, contó.
“Yo no tengo auspiciantes en mi carrera; todo es fruto del esfuerzo que hace mi familia. Además, y no sé bien por qué problema la Federación Argentina no tiene disponible un gran maestro para que se ocupe de mi entrenamiento. Esto me obligó a ser autodidacta. Entreno solo”, explicó Schnaider.
Ese factor lo obliga a cumplir por su cuenta una rutina de entrenamiento que consiste en muchos ejercicios de táctica. Amte cada torneo, se prepara mirando previamente las partidas del rival de cada jornada, para identificar los puntos fuertes y débiles de su juego.
Ahora, su mirada está puesta en los sueños que siguen. “Ojalá algún día pueda estar representando a la Argentina en una olimpíada. No estaría mal que en ese equipo estuviéramos Faustino (Oro) y Joaquín y Francisco (Fiorito). Sería divertido. Por eso prefiero seguir soñando. Porque yo también quiero ser campeón mundial”, afirmó el adolescente.