Una vecina sufrió un ataque de un perro, que le provocó lesiones en una pierna. Para completarla, fue al hospital y en la guardia le explicaron que debía esperar porque su caso no era urgente y que debía comprarse la antitetánica por su cuenta.

El ataque ocurrió en la mañana del este miércoles. La vecina caminaba por un que transita habitualmente cuando varios perros se volvieron agresivos. Finalmente, uno la mordió.
Gabriela Muñoz, la víctima, contó que “fue en la calle Roca y Córdoba, casi en el centro. Están los perros callejeros, los vecinos le dan de comer en la vereda”, dijo.

Sobre el suceso describió que “Había varios perros ahí. Pero el que me mordió es un perro grande que salió de la nada, no lo vi, me atacó. Le doy con la cartera y grito, el perro me seguía mordiendo”.

“Empecé a los gritos, me vio un señor de un taller sobre la Roca y él salió a verme con el empleado. Ellos espantaron a los perros, aparte me curaron, me llevó el señor del taller hasta el hospital”, dijo y precisó que en el centro médico “No me pusieron puntos”.

Respecto al tema de los canes, afirmó que “La verdad, no podés andar por ningún lado porque los perros están en todos lados”.

Gabriela, dueña de mascotas a los que mantiene en su patio, señaló que “Si el perro seguía mordiendo, los otros que estaban alrededor me iban a morder también, están todos en la calle los perros, nadie se hace cargo”, sostuvo.

En la pierna, cerca del tobillo de Gabriela, quedaron las huellas de los dientes del perro mordedor. Fue trasladada por el vecino solidario al hospital y allí debió esperar para que la atendieran al tiempo que le dieron la receta para que compre la antitetánica.

Respeto al perro mordedor, le contaron que es del barrio, tiene dueño pero que es inútil preguntar por el propietario porque nadie asume la responsabilidad.