La solidaridad bien entendida -fuera de campaña y de promoción personal- sigue siendo un valor en la comarca petrolera. Y Max Pawer, es uno de los que hace el bien sin mirar a quién. Una señora fue a su local a comprar grasa para hacer tortas fritas, Max explicó que la vecina tiene 70 años y su emprendimiento es lo que le da sustento a su vida.
En ese momento a la compra le agregó 4 kilos más de grasa de regalo para que pueda seguir produciendo. A la vecina la podemos encontrar en inmediaciones de La Anónima del barrio Unión