Entre el lunes 26 de julio y el domingo 8 de agosto se aplicaron 2.344.328 segundas dosis, un 33% más que en los quince días previos. El dato es consistente con la estrategia del Ministerio de Salud de aumentar el porcentaje de la población con los esquemas completos para brindar una mayor protección frente al posible ingreso de la variante Delta.
La aplicación de segundas dosis en Argentina se incrementó en las últimas dos semanas un 33% respecto a los quince días previos en tanto que la mayoría de la población aceptó la combinación de vacunas contra el coronavirus, una estrategia que demostró ser segura y eficaz en estudios nacionales e internacionales.
"Entre el lunes 26 de julio y el domingo 8 de agosto se aplicaron 2.344.328 segundas dosis de las vacunas contra el coronavirus (lo que corresponde a las semanas 30 y 31), un 33% más que las que se habían aplicado entre lunes 12 y el domingo 25 de julio (semanas 28 y 29)", dijo a Télam el bioquímico y analista de datos Santiago Olszevicki en base a los reportes oficiales.
Olszevicki aseguró que "el récord de segunda dosis, hasta el momento, se dio entre el lunes 2 y el domingo 8 de julio (semana 31) con 1.408.448 vacunas aplicadas".
Si se analiza la proporción en el total de las vacuna inoculadas se observa que de las 3.468.936 que se aplicaron entre la semana 30 y la 31, las segundas dosis constituyeron un 67%; mientras que de las 4.808.384 dosis aplicadas entre las semanas 28 y 29 fueron sólo el 36%.
El dato es consistente con la estrategia difundida por el Ministerio de Salud de aumentar el porcentaje de la población con los esquemas completos (dos dosis) para brindar una mayor protección frente al posible ingreso de la variante Delta que está impulsando nuevas olas de contagios en varias partes del mundo.
El objetivo es lograr en agosto que el 60% de la población mayor de 50 esté vacunada con las dos dosis comenzando por aquellos que se dieron hace más tiempo la primera inyección y por personas con comorbilidades ya que la meta es reducir las internaciones y la mortalidad.
Según datos oficiales, hasta este sábado Argentina había vacunado con una dosis a 26.577.125 personas y con dos dosis a 9.884.094, lo que representa poco más del 57,8% y 20,9% de la población total respectivamente.
En referencia a la población objetivo, el Ministerio estimaba hasta el viernes que está vacunada con dos dosis un 49,8% de la población mayor de 50 años. Este porcentaje aumenta según la franja que se tome: se estima que el de la cobertura con el esquema completo asciende a 60% entre las personas mayores de 60 años y a 69,8% entre los mayores de 70 años.
Combinación de esquemas
El jueves la ministra de Salud, Carla Vizzotti, aseguró que la aceptación de la población a la combinación de esquemas de vacunas contra el coronavirus "es altísima", al recibir formalmente las primeras dosis Sputnik V elaboradas por Laboratorios Richmond en la Planta de Operaciones de Logística Farmacéutica de Andreani, en el partido bonaerense de Malvinas Argentinas.
Y recordó que durante agosto el objetivo "es priorizar la aplicación de las segundas dosis" en el país y seguir "con los estudios de esquemas combinados" de inmunizantes.
Esta semana también el ministro de Ciencia y Tecnología, Roberto Salvarezza, dijo que "el 80% de las personas está aceptando la combinación de vacunas" y celebró que más de 9,5 millones de personas hayan completado los esquemas.
En la Ciudad de Buenos Aires, por ejemplo, de las 239.142 personas que tenían la primera dosis de la Sputnik V y fueron contactadas para ofrecerles segunda dosis de Moderna o AstraZeneca, más de 225 mil aceptaron la propuesta, según la última información oficial.
El miércoles 4 de agosto el Ministerio de Salud anunció que, a raíz de la evidencia científica internacional y nacional, las personas podrían elegir entre esperar la segunda dosis de la vacuna que ya se aplicaron o bien combinar esquemas de la siguiente manera: primera dosis de Sputnik V con AstraZeneca o Moderna y primera dosis de AstraZeneca con Moderna.
En la recomendación, la cartera sanitaria señaló que estos esquemas heterólogos se ofrecerán en el caso de que "la vacuna utilizada como primera dosis no estuviese disponible, o si la persona presentó anafilaxia o una reacción alérgica grave a la primera dosis".
Se estimaba que en Argentina había 1.300.000 personas que habían dado la primera dosis de la Sputnik V hacía más de tres meses y aunque la inmunidad otorgada no vence, completar el esquema refuerza la protección y la hace más duradera.
La combinación de vacunas comenzó a estudiarse en todo el mundo, en principio, como una salida frente a la escasez en la oferta de inoculantes; sin embargo, algunos estudios arrojaron que la intercambiabilidad de componentes (esquemas heterólogos) aumentó la respuesta inmunológica por lo que hoy se evalúa como estrategia independientemente de la disponibilidad.
"Todos los estudios que se han realizado de combinación de vacunas, tanto en el mundo como en Argentina, han demostrado que son seguras y eficaces; esto significa que no generaron efectos adversos, en tanto que la respuesta del sistema inmunológico fue similar o superior a los esquemas homólogos (dos vacunas iguales)", indicó la médica infectóloga Elena Obieta.
Para la especialista existen ejemplos de esquemas heterólogos de vacunas contra otras enfermedades como el neumococo. "Primero se da la de 13 serotipos y después se da la conjugada de 23 serotipos", describió Obieta, quien es además Jefa del Servicio de Enfermedades Transmisibles y Emergentes de San Isidro.
Por otro lado, recordó que "la Sputnik V es en sí un esquema heterólogo porque tiene dos componentes diferentes en primera y segunda dosis".
"También nos vacunamos cada año contra la gripe en base a los virus que están circulando y porque los anticuerpos caen, y seguramente se hacen con diferentes marcas de vacunas, así que los esquemas combinados ya tienen muchos antecedentes en cuanto a seguridad", concluyó.