Alison Calfunao, la joven madre neuquina que enfrentó un calvario de salud, continúa su asombrosa recuperación en Buenos Aires. Tras someterse a un trasplante de corazón y la amputación de una pierna luego de una intervención de ligadura de trompas, Alison se encuentra ahora en una clínica de rehabilitación, preparándose para recibir una prótesis que le permitirá volver a caminar.

A sus 29 años, la fuerza de Alison emana de sus dos pequeños hijos, su compañero Emiliano, su familia y los cientos de neuquinos que la acompañaron con oraciones y apoyo. Su objetivo principal es retomar la vida que se vio bruscamente interrumpida hace apenas dos meses.

“Estoy evolucionando bastante bien, gracias a Dios. Cardiológicamente estoy bien. Obviamente, estoy yendo al gimnasio con mis cuidados. Voy dos veces por día para adaptar la pierna para la prótesis, estoy preparando el cuerpo”, relató Alison en declaraciones radiales, mostrando su optimismo tras la traumática experiencia.

Después de la exitosa operación de trasplante de corazón en el Hospital Italiano, su rehabilitación se lleva a cabo en la Clínica Araucaria. La espera de la prótesis es el paso crucial para recuperar su movilidad. Emiliano, su esposo, confirmó que en 15 días, el equipo de ortopedia encargado de fabricar la prótesis visitará la clínica para tomar las medidas. Mientras tanto, Alison se dedica con máximo esfuerzo a sus terapias.

Emiliano destacó el compromiso del equipo profesional abocado a la recuperación de su esposa. “Le van a fabricar la mejor prótesis para que ella pueda vivir lo más normal posible. La verdad es que nos emocionó, a mí me emociona y me pone contento porque es lo que esperábamos”, expresó con gratitud.

La pareja, que se conoció en 2014, ha madurado junta y hoy lucha por el bienestar de sus hijos, a quienes describen como su tesoro. “Es lo que más la motiva a ella también a remarla todos los días”, agregó Emiliano. Aunque sus hijos permanecen en Neuquén al cuidado de la familia, la distancia se siente. “Están bien cuidados con mucho amor, pero los extrañamos, para ellos fue muy chocante ver a la mamá así”, comentó Emiliano sobre el estado de salud de Alison antes del trasplante.

Alison también quiso agradecer el apoyo recibido. “Quiero darles gracias a todos, la verdad que a todos los que oraron por mí, a los que estuvieron en cada momento que mandaron fuerza porque me sirvió un montón”, dijo emocionada.

Su mayor anhelo es volver a caminar para regresar a Neuquén y reunirse con su familia. En una entrevista con LU19, confió: “Hoy me encuentro más tranquila porque salí de lo peor, estoy en la recta final, pero la pasé mal. Me desperté y no sabía dónde estaba, tenía alucinaciones, trataban de calmarme… tenía miedo de no volver a despertar”. Finalmente, Alison afirmó: “Fue un proceso bastante traumático, pero ahora entiendo que estoy viva y tengo que salir adelante. Quiero darle gracias al ángel que me donó el corazón y que hoy puedo seguir con mis hijos”.