El Gobierno nacional formalizó hoy, a través de una resolución publicada en el Boletín Oficial, una serie de aumentos escalonados del salario mínimo, vital y móvil (SMVM) que se implementarán entre mayo y agosto del corriente año. Esta medida se tomó ante la falta de consenso entre los representantes de los trabajadores y los empresarios en el ámbito del Consejo Nacional del Empleo, la Productividad y el Salario Mínimo, Vital y Móvil.
Según el texto oficial, "luego de un extenso intercambio de opiniones, durante el cual cada sector realizó sus exposiciones y deliberaciones, no hubo consenso en los términos de lo establecido en el artículo 137 de la Ley N° 24.013 y sus modificatorias". Ante este escenario, el Ejecutivo decidió fijar los incrementos por decreto, tal como había ocurrido en diciembre pasado cuando se estableció la última actualización del SMVM.
La nueva disposición establece un aumento total del 8,5 por ciento distribuido en cinco tramos mensuales. De esta manera, el salario mínimo, que actualmente se sitúa en $302.600, experimentará las siguientes modificaciones:
A partir del 1° de mayo de 2025: $308.200 para trabajadores mensualizados con jornada legal completa y $1.513 por hora para jornalizados.
A partir del 1° de junio de 2025: $313.400 para mensualizados y $1.567 por hora para jornalizados.
A partir del 1° de julio de 2025: $317.800 para mensualizados y $1.589 por hora para jornalizados.
A partir del 1° de agosto de 2025: $322.000 para trabajadores mensualizados y $1.610 por hora para jornalizados.
Esta decisión marca una nueva intervención del Poder Ejecutivo en la fijación del salario mínimo, repitiendo el mecanismo utilizado a fines del año pasado ante la imposibilidad de alcanzar un acuerdo tripartito. La medida seguramente generará diversas reacciones en los sectores involucrados, con los sindicatos buscando una recomposición salarial que consideran necesaria frente al contexto económico actual y los empresarios evaluando el impacto en sus costos laborales.
Se espera que en los próximos días tanto las centrales obreras como las cámaras empresariales emitan sus opiniones respecto a esta nueva actualización salarial impuesta por decreto.