La Comisión Interna de la Asociación Trabajadores del Estado en el INDEC (ATE-INDEC) emitió una contundente advertencia sobre el grave deterioro del poder adquisitivo de los empleados de la Administración Pública Nacional. Según un informe del gremio, los trabajadores estatales acumulan ocho años y medio consecutivos de pérdida salarial desde diciembre de 2016, con una aceleración alarmante en los últimos ocho meses.
El estudio presentado por ATE-INDEC revela cifras impactantes. Tomando como referencia la categoría D0, el sindicato señaló que en diciembre de 2016, el salario equivalente actual superaba los $1.300.000, mientras que en la actualidad "apenas supera los $600.000". Esta situación, aseguran, se replica en el resto de las categorías salariales.
"Durante este período, los estatales perdimos aproximadamente la mitad del valor de nuestro salario", denunció la entidad gremial, apuntando directamente hacia las políticas de ajuste y achique del Estado Nacional implementadas por el gobierno de Javier Milei. "Con este escenario, Milei amenaza que esto va a continuar así, que van a seguir los despidos y el ajuste al salario", alertaron desde ATE-INDEC.
El sindicato también expresó su rechazo al último acuerdo paritario que establece un incremento del 1,3% hasta mayo, calificándolo como "otro insulto a quienes trabajamos en el Estado". El informe además encendió las alarmas por la situación de los trabajadores monotributistas, para quienes "ni siquiera hay rumores de aumento".
Ante este panorama crítico, ATE-INDEC hizo un llamado a la unidad de todos los trabajadores del sector público para enfrentar las políticas gubernamentales.
"Los trabajadores del Estado debemos responder todos juntos, organizándonos en defensa de nuestro salario sin distinguir formas de contratación", enfatizaron, invitando a los empleados de la Administración Pública a afiliarse al gremio. La reapertura de las paritarias en el sector se erige como un reclamo central para intentar frenar la continua pérdida del poder adquisitivo que afecta a miles de familias estatales.