El titular nacional de la Central de los Trabajadores de la Argentina Autónoma (CTAA), Hugo Godoy, denunció que el Gobierno nacional designó a “un hombre de Techint y de la Unión Industrial Argentina (UIA), el empresario Julio Cordero, como nuevo secretario de Trabajo en reemplazo de Omar Yasin con el propósito de poner al Estado en manos de los grandes grupos económicos”.
Godoy sostuvo en un documento de prensa de la CTAA, que colidera con el visitador médico Ricardo Peidro, que el reemplazante de Yasin “es gerente del Grupo Techint y uno de los representantes de la UIA y, hasta este momento, asesoraba a la ministra de Capital Humano, Sandra Pettovello”.
“Cordero fue quien, en la última reunión del Consejo del Salario Mínimo, Vital y Móvil que se realizó en febrero, operó como representante de la UIA junto al saliente Yasín para inhabilitar a ese organismo. También fue uno de los representantes de los grupos económicos que en 2023 durante el debate en Diputados se pronunció en contra de reducir la jornada laboral”, puntualizó el dirigente en el documento.
Para Godoy, extitular nacional de la Asociación Trabajadores del Estado (ATE), “cambió la persona al frente de Trabajo, pero continúan los mismos intereses empresariales administrando esa secretaría y concentrando poder en manos de gerentes de Techint y Paolo Rocca”, señaló el gremialista.
El dirigente estatal consideró en ese sentido que el Gobierno “utiliza las estructuras del Estado para continuar concretando el saqueo de los bolsillos de los trabajadores, destruir a la pequeña y mediana empresa y agravar el industricidio”.
También denunció que existe “una actitud cómplice de las cámaras empresarias UIA, CAME y AEA, las que mientras se produce un descalabro en la actividad productiva y se cierran fábricas como Acindar, no dicen nada, pero utilizan sus posiciones de privilegio en el Gobierno para empobrecer al pueblo”.
“Cordero es además un derrotado, ya que fue uno de los tantos abogados de los grupos económicos que trabajó en la redacción del DNU (70/2023) que rechazó el Senado por amplia mayoría. Ese fue un triunfo de la constancia del pueblo para impedir que se gobierne por decreto y para limitar a un presidente déspota. Hay que seguir creciendo en protagonismo. Los representantes institucionales deben hacerse cargo de la capacidad movilizadora trabajadora para dar todas las peleas”, remarcó.
Godoy concluyó afirmando que ahora es el turno para que Diputados asuma idéntica “actitud patriótica” y termine de forma definitiva con “el intento de gobernar por encima de las instituciones”.