La distribución de cargos en el gabinete de Claudio Larraza no estuvo exenta de tironeos. Incluso, hay quienes aseguran que ya hay un sector que va a confrontar al jefe comunal.
Los que conocen el entramado político, señalan que hay un secretario que pidió 36 cargos y, como se los negaron, surgieron los primeros enojos.
Desde el larracismo explicaron: “no podemos hacer lo mismo que el proyecto que se acaba de ir del municipio que se llenó de cargos políticos. Había 80 direcciones. Las dejamos en 40 porque queremos ahorrar. Nuestro proyecto es distinto y hay que demostrarlo con hechos”.
Un empresarios de medios de la ciudad, incluso, intentó impugnar algún miembro del gabinete aunque Claudio Larraza no cedió a la pretensión. “El intendente es Claudio. Tiene que quedar claro”, dijo uno de los hombres más cercanos a Larraza.
Pero en el gabinete, ya advirtieron que el secretario enojado se habría convertido en un aliado de colectoras disconformes y ya habrían deslizado críticas al armado del jefe comunal. Por ahora, son por lo bajo: “en el gabinete hay gente que no aportó ni aparecieron en la campaña”, afirman. Desde el gabinete devolvieron: “hay colectoras que sacaron 150 votos y quieren gobernar”.