El conductor intentó evadir un control y huyó durante 19 kilómetros. Al ser interceptado, aseguró que los animales eran para el Ministro de Gobierno y el Jefe de la Policía de Chubut. El gobernador Ignacio Torres lo despidió de inmediato.
Un grave episodio de corrupción y desobediencia sacudió la tranquilidad de la Nochebuena en la provincia de Chubut. Un funcionario del Ministerio de Gobierno y Justicia, identificado como de apellido Martínez, fue detenido tras una persecución policial mientras transportaba 27 chivos faenados de manera ilegal en un vehículo oficial del Estado provincial.
El hecho comenzó alrededor de las 23:00 horas del 24 de diciembre, cuando efectivos de la Comisaría de Dolavon realizaban controles en la Ruta 25. Al observar una camioneta Renault Alaskan (dominio AF-384-PY) que circulaba con la suspensión trasera notablemente baja y cargada con bultos sospechosos, intentaron detenerla.
Persecución y amenazas a la autoridad
Lejos de acatar la orden, el conductor emprendió una fuga que se extendió por 19 kilómetros, siendo perseguido por el móvil policial 1.175 con sirenas y balizas. Al ser finalmente interceptado a la altura del kilómetro 65, el hombre de 45 años reaccionó de forma violenta e intentó utilizar sus influencias para frenar el procedimiento.
“Los chivitos son para tus jefes, el ministro y el jefe de policía, fueron comprados por ellos. ¿Quieren que los llame yo o los llaman ustedes?”, increpó Martínez a los oficiales, según consta en el informe policial.
Al inspeccionar la caja de la camioneta, que pertenece a la flota del Ministerio de Gobierno, los efectivos hallaron bolsas blancas con manchas de sangre de las que sobresalían extremidades de los animales faenados.
Consecuencias inmediatas: despido y denuncia
La respuesta del Ejecutivo provincial no se hizo esperar. Tras conocerse el informe de la Unidad Regional de Trelew, el gobernador Ignacio Torres firmó un decreto para dejar sin efecto de manera inmediata la designación del funcionario, quien quedó formalmente "eyectado" de la administración pública.
Además de la pérdida de su cargo, Martínez quedó detenido por desobediencia judicial por disposición del fiscal de turno. Paralelamente, se inició una investigación para determinar la procedencia de los animales y confirmar si, como afirmó el detenido, existía una red de complicidad que involucrara a altos mandos o si se trató de una maniobra desesperada para evitar el arresto.
El vehículo oficial quedó incautado y será sometido a una requisa completa en las próximas horas para sumar pruebas a la causa judicial por transporte ilegal y malversación de caudales públicos.
