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El Ejecutivo Municipal lanzó la campaña "Plaza Huincul libre de pirotecnia", regido por la Ordenanza Municipal Nº1365/12, que prohíbe la venta, acopio, compra y uso de todo tipo de pirotecnia.

Como parte del plan, la comuna a través de las secretarías de Seguridad Ciudadana; y Mujer, Género y Diversidad, coordinó una serie de actividades de concientización y control para garantizar el cumplimiento de la ordenanza en beneficio de las personas, animales y entorno que pueda verse afectada por el uso de fuegos de artificio.

El deliberante sancionó la Ordenanza Municipal 1365/2012 que declara a la ciudad de Plaza Huincul como "territorio libre de pirotecnia" y prohíbe "en todo el Ejido Municipal la fabricación, tenencia, guarda, acopio, depósito, venta o cualquier otra modalidad de comercialización, tanto mayorista como minorista, y el uso particular de elementos de Pirotecnia, Cohetería y de todo producto destinado a provocar efectos mecánicos, visuales o auditivos mediante detonación, deflagración, combustión o explosión, así como aquellos de proyección cuyo efecto secundario produzca explosión, deflagración o detonación".

Durante el mes de diciembre se realizarán controles sorpresivos en comercios y accesos a la ciudad por ruta nacional 22 y ruta provincial 17 para evitar el ingreso y venta de productos de cohetería en Plaza Huincul; y además se dispondrá de líneas de comunicación para denunciar la venta y uso de fuegos de artificio: los números telefónicos 4960403, 2994095390 ó 2995351489 de la dirección de Bromatología; la línea 103 de Defensa Civil; y el portal web www.plazahuincul.gob.ar mediante la opción de Denuncias Anónimas de la secretaría de Seguridad Ciudadana.

¿A quiénes afecta la pirotecnia?

Estudios sostienen que los fuegos de artificio con detonación, combustión o explosión representan un riesgo para personas con Trastornos del Espectro Autista (TEA), adultos mayores, bebés e infantes, mascotas y al medio ambiente.

Las personas con TEA tienen hipersensibilidad a los sonidos en general debido a las conexiones entre la amígdala y la corteza cerebral, que están disfuncionadas. las estimulaciones sonoras pueden generar estrés y un gran nivel de alteración conductual y emocional.

Por otra parte, los fuegos artificiales representan una fuente importante de contaminantes atmosféricos antropogénicos con un incremento significativo en la concentración de material particulado (MP) en el ambiente. La exposición a corto plazo del MP podría agudizar enfermedades respiratorias, problemas cardiovasculares y reducir las funciones pulmonares.

La población animal también experimenta consecuencias por las explosiones de cohetes y fuegos de artificio, exponiéndose a estados de estrés, estados de fobia, aturdimiento y conductas no habituales como escapar sin rumbo, lastimarse o lastimar a otros.