El plantel de futbolistas de San Lorenzo de Almagro hizo pública una enérgica queja, exponiendo la grave crisis que atraviesa la institución. Los jugadores manifestaron su profunda preocupación debido al incumplimiento de pagos que se arrastra desde agosto y la carencia de infraestructuras básicas para el desempeño de su profesión.
A través de un comunicado difundido en redes sociales por el capitán, Gastón Hernández, el grupo expresó su malestar: "Queremos manifestar públicamente nuestra profunda preocupación y malestar ante la delicada situación que seguimos atravesando desde el comienzo de la temporada", iniciaron el texto.
A pesar del caos institucional, el equipo, bajo la dirección técnica de Damián Ayude, mantiene un buen rendimiento deportivo, ubicándose quinto en la Zona B y con posibilidades de clasificar a la Copa Sudamericana.
Incumplimientos y falta de servicios
Los jugadores detallaron la magnitud de los problemas que enfrentan a diario, señalando que la falta de pagos impacta directamente en sus familias:
"Desde el mes de agosto no hemos percibido, en algunos casos, íntegramente nuestros salarios, lo que afecta directamente a nuestras familias y compromete el normal desarrollo de nuestra actividad profesional."
A esta situación económica, se suman severas deficiencias en las condiciones de trabajo: falta de suministro de comida adecuada, ausencia de servicios esenciales en los vestuarios, como el agua caliente, y una persistente falta de soluciones por parte de la dirigencia, a pesar de promesas reiteradas que jamás se materializaron.
Exigen respeto y dignidad
El comunicado subraya que, a pesar de las adversidades, han mantenido una conducta intachable: "Hemos sido pacientes, responsables y respetuosos, y seguimos entrenando, compitiendo y representando al club con el mayor compromiso posible".
Sin embargo, el grupo considera que la situación llegó a un punto límite, siendo imperativo "alzar la voz nuevamente". Los futbolistas enfatizaron que la disputa va más allá de lo económico, tratándose de una cuestión de "respeto, dignidad y condiciones laborales mínimas que todo trabajador merece".
Para concluir, calificaron la situación actual como "insostenible", requiriendo una solución "inmediata y seria". El mensaje final fue un llamado a la dirigencia: "Esperamos que las autoridades del club actúen con la responsabilidad que el momento exige. No buscamos el conflicto, sino una respuesta concreta y justa que nos permita desarrollar nuestra profesión en condiciones acordes al compromiso que siempre hemos demostrado".
