Los Pumas le pusieron vitamina "H" a un partido que le era difícil, metió dos contragolpes mortales y le ganó 2-0 a Atlas para desatar el festejo y dar la vuelta olímpica en categoría +50. "Pelela" Bota y Ramón Maldonado marcaron los goles del título.
Altas llegaba como favorito. Tenía el goleador del torneo, varios jugadores de buen pie como "Cheli" Sepúlveda y José Mercado, pero también había ganado con comodidad la zona clasificatoria. No podía fallar.
Pero, en el fútbol, los partidos no se ganan en los papeles; hay que jugarlos y hacer los goles.
Como era de esperar el equipo celeste aguantó atrás para salir rápido de contraataque vía su delantero más peligroso: José "Pelela" Bota. Así pasaron 50 minutos.
El partido se había vuelto trabado, con muchos reclamos y a puro nervio. A ese momento, llegaron con 2 expulsados en Atlas y uno en Los Pumas.
Atlas, iba con porfía, se había quedado sin Cheli Sepúlveda en el centro de la defensa y Pelela lo aprovechó: escapó por derecha, se sacó a dos de encima, ingresó al área y cuando le le salió al cruce el tercero, ya cerca del punto penal, le dio duro al arco. La pelota pasó por entre las piernas del central y se metió a la derecha del arquero que no pudo hacer nada.
Atlas se fue más arriba todavía a buscar el empate, perdió una pelota en la salida y el jugador que recuperó el balón abrió a la izquierda por donde entraba solo Ramón Maldonado que le metió un derechazo tremendo que se coló a media altura. Golazo y locura celeste.
Hasta el final, Los Pumos se defendieron a dientes apretados mientras que Atlas chocó con un muro de piernas cada vez que intentó acercarse al arco rival.