(Somos Télam)
El Archivo Popular de la Memoria (APM) denunció hoy que “hay al menos 44 casos” de personas desaparecidas que fueron cremadas en el Campo de Deportes de la Escuela Mecánica de la Armada (Esma) durante la última dictadura militar, según una investigación que realizó la organización para reclamar en la Justicia por la cesión de esos terrenos al club River Plate.

Los casos pertenecen a personas asesinadas en la vía pública o en el excentro clandestino de detención que funcionó en la exEsma, que no fueron parte de los llamados “vuelos de la muerte”, entre ellos, los del periodista Rodolfo Walsh, la militante de Montoneros Norma Arrostito, y el dirigente sindical Raimundo Villaflor.

El AMP realizó este mediodía una conferencia de prensa 30 en la “Casa Pepa Noia”, ubicada en Brasil 444 de la ciudad de Buenos Aires, para dar a conocer la investigación que surgió de la lectura de las 11.600 páginas que componen la sentencia de la Megacausa Esma, en la cual se consigna que “al menos 44 casos” de desaparecidos que fueron cremados en ese lugar.

Encabezaron este encuentro los integrantes del APM y sobrevivientes de la Esma Carlos Loza, Carlos “Sueco” Lordkipanids y Mónica Dittmar, esposa del estudiante de arquitectura y exintegrante de la Federación Universitaria Peronista (FUP), Hernán Abriata, quien se encuentra desaparecido y fue visto por última vez con vida en ese centro clandestino.

Hay alrededor de 44 compañeros que hemos podido establecer que fueron cremados ahí y esta lista está abierta porque todavía falta profundizar más en la investigación”.

La investigación surgió a partir de la cesión de las siete hectáreas del predio Campo de Deportes de la Esma que la Agencia de Administración de Bienes del Estado (AABE) le otorgó en junio de 2023 al club River Plate.

El juzgado federal 12, a cargo del juez federal Ariel Lijo, había solicitado que, previamente, el Equipo Argentino de Antropología Forense (EAAF) estudiara el terreno para “descartar la presencia de restos humanos”, tarea que se encuentra en desarrollo.

“Hay alrededor de 44 compañeros que hemos podido establecer que fueron cremados ahí y esta lista está abierta porque todavía falta profundizar más en la investigación”, afirmó durante la conferencia Loza.

Además, destacó que si bien “generalmente se asocia” a las desapariciones en la Esma con “los vuelos de la muerte”, en los casos relevados se determinó que en el Campo de Deportes “no hubo asesinatos sino cuerpos que fueron cremados en el lugar”.

Loza repasó “algunos ejemplos concretos” de los 44 casos, entre los que se destacan, las desapariciones de Walsh, Arrostito y Villaflor.

En tanto, Lordkipanids reprochó a la Justicia que para “llegar a esas conclusiones” su organización solo tuvo que “dar lectura a las más de 11 mil páginas que componen el cuerpo de la causa III de la Esma”, en el que hay testimonios de sobrevivientes, cabos, alumnos, y exsoldados que estuvieron destinados en la Esma.

Además, destacó la participación en la investigación de un biólogo molecular, convocado para explicar por qué los desaparecidos eran arrojados con vida al Río de La Plata o al océano Atlántico desde aviones. .

.Al respecto, afirmó que los genocidas buscaban que “se produzca la muerte por ahogamiento” y así generar que “el cuerpo se hunda, sobre todo en aguas de mar adentro con una temperatura específica”.

En cambio, advirtió, que ese mismo proceso no podía ocurrir arrojando un “cuerpo de un compañero que llegó muerto en un tiroteo, o murió por ser sometido en las torturas” y que para esos casos, se utilizaba, el “otro método de la cremación”.

Lordkipanids afirmó que luego se “efectuará la denuncia correspondiente” y adelantó que se llevará el “material con la exigencia que el juzgado y el tribunal que actúa en la causa proceda en la investigación profunda, investiguen y establezcan la verdad sobre esta situación”.

Por su parte, criticó al juez federal Ariel Lijo por solicitar la intervención del EAAF: “No van a encontrar cuerpos óseas en ese lugar, es absurdo buscar restos en un campo como siete hectáreas de hechos que ocurrieron hace 40 años” y criticó que “pretenden con esa maniobra negar el valor de los testimonios de los sobrevivientes”.

Desproteger este espacio de memoria y cederlo a manos privadas contribuye a la postura negacionista y apologista de quienes aún hoy no reconocen el genocidio y ponen en duda a los 30 mil compañeros”.

En sintonía, Dittmar manifestó que “desproteger este espacio de memoria y cederlo a manos privadas contribuye a la postura negacionista y apologista de quienes aún hoy no reconocen el genocidio y ponen en duda a los 30 mil compañeros”.

Desde 2014, existe una presentación por la querella que encabeza Patricia Walsh (hija de Rodolfo Walsh) y Carlos Lordkipanidse, para exigir que las siete hectáreas del Campo de Deportes se incorporen a las 17 hectáreas que constituyen el Espacio Memoria ESMA, “por su valor probatorio, institucional y simbólico”.