Luego de una negociación que se prolongó por alrededor de cinco horas, Ricardo Aimi se entregó a la policía bonaerense. El hombre de 41 años golpeó y amenazó a su suegra y a su pareja en la localidad de El Palomar.

Tras diversas negociaciones, el hombre liberó a su suegra y a la hija de su pareja y se entregó.

Dos mujeres y una niña fueron tomadas este miércoles como rehenes por el esposo de una de ellas, quien las mantuvo cautivas y bajo amenazas con un arma blanca durante casi cinco horas en una vivienda de la localidad bonaerense de El Palomar, hasta que intervino el Grupo Halcón y fue detenido, informaron fuentes policiales y judiciales.

El episodio se inició cerca de la 1.30 en una casa situada en Sourignes al 2.100, de la mencionada localidad del partido de Morón, en el oeste del conurbano.

Según informaron las fuentes a Télam, un hombre de 41 años mantuvo cautivas y bajo amenazas a su pareja, de 40; a la madre de ella, de 71, y a la hija, de 9.

De acuerdo a la pesquisa, el hecho se desencadenó tras una pelea de pareja entre el acusado, identificado como Ricardo Aimi, y su mujer, cuya identidad se reserva.

Tras ello, el acusado golpeó a su suegra y le fracturó el tabique, según dijeron las fuentes consultadas.

Al tomar conocimiento del hecho, efectivos de la comisaría 6ta. de Morón llegaron a la casa, momento en que el hombre tomó un cuchillo y se atrincheró en el jardín de la vivienda, donde amenazó a las mujeres.

Al tornarse la situación más complicada, fueron convocados al lugar un negociador y efectivos del Grupo Halcón de la policía bonaerense, quienes tomaron contacto con Aimi.

Unas horas después, y tras diversas negociaciones, el hombre liberó a su suegra y a la hija de su pareja y pidió la presencia de los medios de comunicación para entregarse.

Finalmente, luego de casi cinco horas de haber comenzado el hecho, el hombre liberó a su pareja y fue detenido.

Las tres mujeres fueron atendidas por personal médico de una ambulancia del Sistema de Atención Médica de Emergencias (SAME) local y se encuentran fuera de peligro.


De acuerdo a los primeros testimonios de la pareja del acusado, ya había sufrido otros hechos de violencia con el acusado, el primero de ellos el pasado 10 de julio, durante la final de la Copa América entre la Argentina y Brasil.

No obstante, Aimi no tenía denuncias por violencia de género ni en la fiscalía ni en el Juzgado de Familia, aunque sí posee una causa por robo en la justicia de La Matanza.

El fiscal Hernán Moyano, a cargo de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 10 especializada en Violencia de Género del departamento judicial de Morón, tomará hoy declaración indagatoria al acusadi por los delitos de "privación ilegítima de la libertad y amenazas".