Seguirán vigentes las modalidades de receta física y la electrónica. La reglamentación se realizó mediante un decreto que lleva las firmas del Presidente, el Jefe de Gabinete, y la Ministra de Salud.
El Gobierno reglamentó la ley de recetas electrónicas o digitales y, a partir de este martes, ya no serán válidas las "recetas foto" tampoco para las personas con enfermedades crónicas que habían quedado exceptuadas de la resolución que a fines de diciembre terminó con esta forma excepcional de prescripción vigente desde marzo de 2020 por la pandemia de coronavirus.
La reglamentación se realizó mediante el Decreto 98/2023, publicado en el Boletín Oficial, con las firmas del presidente Alberto Fernández, el jefe de Gabinete, Agustín Rossi, y la ministra de Salud, Carla Vizzotti.
La medida tiene por objeto permitir que la prescripción y dispensa de medicamentos, y toda otra indicación, puedan ser elaboradas y firmadas a través de firmas electrónicas o digitales, en recetas electrónicas o digitales, en todo el territorio nacional, y que puedan utilizarse en todo el país plataformas de teleasistencia en salud, además de las recetas en papel con firma manuscrita que continúan en plena vigencia, según se informó.
La implementación de los requisitos de las recetas electrónicas o digitales y el registro de sus plataformas será progresivo y aquellas recetas electrónicas o digitales que se están utilizando actualmente continúan siendo válidas, en tanto cumplan con los requisitos básicos previstos por las normas vigentes y en los términos del cronograma que establece la reglamentación.
En este marco, por Resolución 305/2023, publicada también en el Boletín Oficial, la cartera sanitaria nacional puso un plazo hasta el 31 de diciembre de 2023 para la inscripción que deberán realizar las plataformas y sistemas de receta electrónica o digital y de teleasistencia, en articulación con el registro que se defina en cada jurisdicción.
A partir de marzo de 2024 se dará inicio al proceso de aprobación de todas aquellas plataformas que se hayan registrado en el formulario online de inscripción provisoria.
A su vez, a partir de este martes, las farmacias dejarán de aceptar para el expendio de medicamentos la foto de la receta confeccionada en papel y recepcionada por el paciente a través de correo electrónico o WhatsApp, mientras que seguirán vigentes como hasta ahora las modalidades de receta física (papel) y la receta electrónica, según informó la ministra de Salud.
La reglamentación de la Ley 27.553, sancionada en julio de 2020, define cuáles son los datos mínimos que deben consignarse para la validez de las recetas electrónicas o digitales y establece los requisitos de funcionamiento para las plataformas digitales, de modo de garantizar que resguarden la confidencialidad y la inviolabilidad de los datos.
Las recetas deben contener la siguiente información: nombre, apellido, profesión, número de matrícula, domicilio, número telefónico y correo electrónico cuando corresponda.
De acuerdo con el decreto, las recetas electrónicas o digitales deberán tener un identificador unívoco que une profesional, medicamento y paciente, además de ser inalterables y seguras. Los datos deben ser confidenciales y los sistemas progresivamente interoperables para poder intercambiar información con fines sanitarios.
Entre los considerandos de la norma, se indicó que "el Estado nacional posee la responsabilidad de avanzar en el camino de la modernización tecnológica y digital de los procesos inherentes a la atención sanitaria, construyendo capacidades y generando un entramado regulatorio a nivel federal que articule los avances tecnológicos con las necesidades del sistema de salud con centro en los y las pacientes".
En el anexo de la Reglamentación se aclaró, además, que las recetas electrónicas o digitales cuentan con una vigencia de 30 días para el caso de los medicamentos y de 60 días para otras prescripciones (prácticas, estudios, prestaciones), salvo disposición en contrario, y pueden extenderse también para tratamientos crónicos para períodos prolongados de hasta 90 días, tal como lo establece la Resolución 27/2022 del Ministerio de Salud.