La exvicepresidenta Cristina Kirchner, a través de sus abogados Carlos Beraldi y Ary Llernovoy, ha solicitado al Tribunal Oral Federal 2 cumplir su condena a seis años de prisión bajo la modalidad de arresto domiciliario en el departamento donde vive con su hija Florencia, manteniendo su custodia habitual y sin la utilización de tobillera electrónica.

En un escrito de 13 carillas, presentado poco después de conocerse el fallo de la Corte Suprema, la defensa argumentó que la edad de Kirchner (72 años), los riesgos para su seguridad tras el atentado de septiembre de 2022 y su condición de expresidenta hacen que una detención en una cárcel común sea "de manera alguna compatible" con los recaudos de seguridad y los estándares constitucionales. Subrayaron que un eventual traslado a prisión requeriría un "régimen de aislamiento absoluto y de vigilancia permanente", incompatible con la ley de ejecución penal.

Mientras tanto, el juez Jorge Gorini ha otorgado un plazo de cinco días hábiles a todos los condenados para que se presenten en persona en Comodoro Py y queden detenidos. A su vez, requirió al Ministerio de Seguridad que busque lugares adecuados para el alojamiento provisorio.

Sin embargo, los fiscales Diego Luciani y Sergio Mola han firmado un pedido de "inmediata detención" de la exvicepresidenta, al considerar excesivo el plazo de presentación, que incluye un fin de semana y un feriado nacional. La disputa judicial por la modalidad de cumplimiento de la pena de Cristina Kirchner se intensifica.