La fiscal del caso Silvia Moreira, junto a la asistente letrada Agustina Bouyer, formularon cargos hoy a un varón por el homicidio de Francisco Basualdo Mallicán, cometido en momentos previos a la medianoche del domingo 12 de enero, en un barrio de Neuquén capital.

Además, las representantes de la unidad fiscal de Delitos Contra las Personas pidieron al juez que dirigió la audiencia que imponga al acusado, F.N.A, 4 meses de prisión preventiva. Argumentaron que, en libertad, hay riesgo de que el imputado no se someta al proceso –huyó del lugar e intentó ocultar el auto que utilizó- o incluso que lo entorpezca, influenciando sobre los testigos de lo ocurrido.

La teoría del caso de la fiscalía es que el 12 de enero pasado, a las 23:45, Federico Abello mató a la víctima utilizando un arma de fuego, en una vivienda del barrio Villa Ceferino. Hasta esa casa había llegado Basualdo Millacán para realizar una transacción comercial relacionada con la compra de estupefacientes. La fiscal Moreira explicó que en el interior, el imputado y la víctima comenzaron una discusión y un enfrentamiento a golpes, hasta que la víctima se retiró del lugar, perseguida por el imputado. Fuera de la casa, F.N.A efectuó al menos tres disparos presumiblemente con una pistola calibre 9 mm. y uno de ellos le impactó a Basualdo Mallicán en la zona del tórax, provocándole la muerte inmediata.

“Inmediatamente luego de cometido el hecho, el acusado regresó a su domicilio, retirándose raudamente a los pocos minutos -junto a su pareja-, a bordo de un vehículo”, precisó Moreira respecto de la conducta que asumió F.N.A luego del crimen y que se extendió hasta la tarde de ayer, 13 de enero, cuando se entregó en la sede del Ministerio Público Fiscal.

La fiscal encuadró los hechos en el delito homicidio agravado por el uso de un arma de fuego, en carácter de autor (artículos 79; 41 bis y 45 del código penal).

Tras describir los hechos y la acusación, Moreira pidió al juez que imponga 4 meses de prisión preventiva al acusado y argumentó que en el caso se configuran los riesgos de entorpecimiento de la investigación y de fuga o no sometimiento al proceso. Un aspecto que destacó fue la conducta de F.N.A al huir del lugar en el que se cometió el homicidio, pero también que ocultó el arma utilizada y que los testigos de lo ocurrido son menores de edad sobre los que podría ejercer su influencia. También remarcó que el acusado “es una persona violenta”, que actualmente se encuentra en un proceso de suspensión de juicio a prueba y que tiene procesos abiertos en el fuero de familia situaciones de violencia.

Tras escuchar a las partes, el juez de garantías Luis Giorgetti tuvo por formulados los cargos y dispuso, a partir de la investigación presentada por la fiscalía, la prisión preventiva por el plazo solicitado.