Climatólogos de distintas partes del mundo prevén el retorno del fenómeno de La Niña para mediados de 2.024. La sequía afecta la economía nacional en el área central de la Pampa húmeda argentina pero también baja el caudal de los ríos de donde toman agua los acueductos neuquinos y se produce hidroelectricidad.
La sequía afectó los cultivos argentinos durante 2.021, 2.022 y 2.023, dejando grandes pérdidas al agro. En la provincia de Neuquén hubo un régimen especial y debieron reducir la generación eléctrica al 50% en 2.021. Esto afectó además del Limay el río Paraná y el Uruguay. En 2.021 se registró la crisis hidrológica más profunda en 77 años.
La Niña alcanzará su máxima intensidad en otoño de 2024 a escala mundial, coincidiendo con el pico de la temporada de huracanes en el Atlántico. Esto, combinado con unas temperaturas oceánicas todavía anormalmente altas (que actúan como el combustible necesario para intensificar los huracanes), podría dar lugar a una situación explosiva en la cuenca del Atlántico Norte.
En el año 23/24 "El Niño", cortó con un largo período de sequías en la región, pero ahora estaría dando señales de debilitarse tras el verano y los primeros meses de otoño próximo.
El Instituto Nacional de Tecnología Agrícola (INTA), emitió un informe donde indica que "para el trimestre febrero-marzo-abril, todos los modelos indican un debilitamiento de los valores cálidos de la temperatura del Océano Pacífico ecuatorial. Se espera que El Niño continúe presente durante lo que resta del verano e inicio del otoño, con una transición hacia la fase neutral del ENSO a partir del trimestre abril-junio".
"Posteriormente, la mayoría de los modelos coinciden en indicar la continuación del enfriamiento del Océano Pacífico central. De esta manera, hacia julio-septiembre 2024 la mayor probabilidad (más del 60%) se asigna a la fase La Niña", sostiene el informe.
El meteorólogo Leonardo De Benedictis predijo un panorama climático que preocupó a los empresarios agropecuarios argentinos. Según el especialista, durante la primavera del 2024 podría volver el fenómeno climático conocido como La Niña.Todavía no está confirmado, faltan algunas condiciones para que se genere el evento, pero hay una probabilidad bastante aseguró De Benedictis.
La Argentina viene de años difíciles en materia de producción agropecuaria. En 2023,las exportaciones del complejo agroindustrial alcanzaron los u$s35.241,4 millones y marcaron una baja de u$s18.869 millones (- 34,9%) respecto de 2022 en Argentina.
La Niña es un fenómeno climático que produce un enfriamiento a gran escala de las aguas superficiales de las partes central y oriental del Pacífico ecuatorial. Además, también trae cambios en la circulación atmosférica tropical en los vientos, la presión y las precipitaciones estimadas.
La primera fase de este acontecimiento esta marcada por la entrada al fenómeno La Niña. Esto ocurre cuando se termina el proceso opuesto - conocido como El Niño y se empiezan a registrar las condiciones climáticas necesarias para que ocurra el evento.
La segunda fase y tercera fase de La Niña esta marcada por el inicio y el desarrollo del fenómeno. En este momento, las aguas cálidas que vienen de las costas asiáticas todavía afectan poco a las aguas del pacifico de América.
Luego de estas tres etapas iniciales sobreviene la cuarta fase y la que más preocupa a los productores. Tras su periodo de latencia llega la maduración del fenómeno y donde las primeras consecuencias climáticas afectan realmente a un territorio extenso. La duración y frecuencia del fenómeno La Niña puede variar de 9 meses a 3 años.
