Diversas autoridades provinciales y municipales aseguran que cambiando las cañerías elevadoras de Buena Esperanza "se duplicará el caudal a potabilizar" dado que las cañerías que había era de 500 mm y las nuevas son de 800 mm.. No obstante, nunca se dio una explicación técnica de cómo sucederá está "duplicación", es decir el doble.

Puede ser una imagen de masa de agua

Un primer dato a considerar es que la infraestructura de tratamiento de agua instalada es la misma y, por ello, difícilmente se pueda tratar más agua de aquella para la que se previó. Es decir las piletas de tratamiento que tienen determinadas dimensiones y están preparadas para determinada cantidad de agua, no parece que pudieran tratar mayor volumen por la simple decisión de elevar mayor cantidad de agua desde el río.

Y lo mismo sucede con las bombas que tienen determinadas características técnicas y volúmenes definidos de producción que, incluso, es lógico que tengan alguna merma por desgaste de material.

Otro cuello de botella parece ser el reservorio de la copa del EPAS de Cutral Co. Actualmente, una vez que baja su nivel, se debe parar el suministro hacia las ciudades para recuperar stock lo que ocurre normalmente en la siesta que es cuando se producen los cortes programados.

En definitiva, quizás se pueda duplicar el agua elevada, pero si se toma como punto base de comparación la pérdida que tenían las cañerías que fueron reemplazadas. Pero, aun cuando se logre ese incremento hay que ver cuánto puede procesar la planta.

Dicho de otra manera, quizás la frase es correcta: "se duplicará el caudal a potabilizar", aunque esto no signifique que llegue a las ciudades el doble del agua potabilizada. Es decir, cómo se trata de un sistema pareciera difícil que se logre semejante incremento de producción cambiando sólo una parte.

Por otro lado, al vecino lo que le interesa es simplemente tener agua.