La confirmación de la condena de la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner por la Corte Suprema de Justicia, que la inhabilita de por vida para ejercer cargos públicos y le impone seis años de prisión, ha puesto en el centro del debate el lugar donde podría cumplir la pena. Dado que la exmandataria cumplió 72 años el pasado 19 de febrero de 2025, la Ley 26.472 le abre la puerta a una posible prisión domiciliaria.
Con el fallo de la Corte Suprema rechazando el recurso extraordinario de su defensa, la atención se centra ahora en el Tribunal Oral Federal N°2 (TOF 2), encargado de determinar el lugar y las condiciones de su eventual detención. Dentro del oficialismo y en el entorno de la exmandataria, se discuten activamente las alternativas para el cumplimiento de la condena.
Hasta el intento de asesinato ocurrido el 1 de septiembre de 2022, Cristina Kirchner residía habitualmente en su conocido departamento del barrio porteño de Recoleta, en la intersección de Juncal y Uruguay. Sin embargo, la exposición pública que ese inmueble generaba, con constantes manifestaciones a favor y en contra, llevó a la titular del Partido Justicialista (PJ) a optar por un perfil más bajo tras el atentado.
Desde entonces, la expresidenta alterna su estadía entre la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y El Calafate, Santa Cruz, donde mantiene su domicilio legal. No obstante, en la capital argentina, se instaló en un departamento antiguo del barrio de Constitución, en las inmediaciones de Avenida San Juan y la calle San José.
Fuentes cercanas al PJ sugieren que esta propiedad en Constitución es la opción más probable para cumplir una eventual prisión domiciliaria, en caso de que el TOF 2 autorice dicho beneficio. El inmueble, de perfil bajo y menos conocido públicamente, se encuentra además en el mismo edificio donde reside su hija, Florencia Kirchner, lo que sumaría un factor logístico y familiar favorable.
La casa en El Calafate, aunque figura como su domicilio legal, se presenta como una opción menos práctica debido a la distancia con la capital federal y la complejidad logística que implicaría trasladarla regularmente para eventuales requerimientos judiciales. La reciente actividad política de Cristina Kirchner, concentrada en CABA y en encuentros en la sede del PJ nacional y el Instituto Patria, la mantiene la mayor parte del tiempo en la capital.
Dos escenarios menos probables, aunque contemplados en caso de una detención inmediata antes de la definición del domicilio final, son un traslado transitorio a la Alcaidía de Mujeres (ubicada en Cavia y Figueroa Alcorta, un espacio destinado a detenidas por causas federales) o el alquiler de una vivienda en el conurbano bonaerense. Sin embargo, estas serían medidas provisionales hasta que se resuelva el régimen de detención domiciliaria.
