La tan anunciada desaceleración de la inflación no se traduce en un alivio para el bolsillo de los argentinos. Un relevamiento de la consultora Focus Market revela que el consumo masivo sigue sin repuntar, profundizando la preocupación por el poder adquisitivo de la clase media.

Mayo no fue la excepción: las compras en supermercados y autoservicios cayeron un 3,2% respecto a abril. La situación es aún más alarmante si se compara con mayo de 2024, un mes ya marcado por el fuerte ajuste del gobierno de Javier Milei, y aun así hubo una contracción adicional del 0,9% interanual. Este último dato es particularmente llamativo, ya que se compara con una base de por sí muy baja, cuando la actividad económica estaba paralizada.

Damián Di Pace, director de Focus Market, explica la paradoja: "La recomposición salarial viene muy en línea con la inflación y los ajustes paritarios resultan insuficientes para revertir la caída acumulada del ingreso real". Aunque las unidades por ticket aumentaron un 2,6% intermensual en mayo, la cantidad de tickets emitidos cayó un 4,1%, lo que significa que la gente va menos al supermercado y compra menos en cada visita.

La principal traba, según el informe, es el fuerte impacto de los servicios en los ingresos familiares. Mientras la inflación promedio mensual se modera, la corrección de precios relativos en tarifas de luz, gas, agua, transporte público, colegios y medicina privada se lleva una parte sustancial del presupuesto. De hecho, la inflación interanual en servicios alcanza un 72,4%, muy por encima del 33,1% en bienes.

Di Pace subraya que, si bien hay indicadores macroeconómicos positivos, "la clase media aún no lo percibe en su economía doméstica". La mayoría de los acuerdos salariales del primer trimestre quedaron por debajo de la inflación, con un 80% de los convenios bajo el 8,6% acumulado en el período. El emblemático caso del gremio de Comercio, que había acordado un 9,6% y el gobierno pidió que se limitara al 3,0%, es un claro ejemplo.

El valor del ticket promedio en supermercados fue de $8.415 en mayo. La cantidad de tickets no solo cayó respecto a abril, sino que también registró una contracción del 10% frente a mayo de 2024. "Este nuevo ciclo no se caracteriza por euforia, sino por cautela", analiza Di Pace, señalando que el consumidor ya no se estockea por miedo a la suba de precios, sino que su principal preocupación es "no administrar el ingreso para llegar a fin de mes". Las empresas de consumo masivo, en respuesta, ajustan estrategias con "promociones selectivas y reforzando presencia en canales de cercanía con descuentos y 2x1".