Aunque aún resta la formalización de su salida de San Lorenzo, Miguel Ángel Russo se prepara para iniciar su tercer ciclo como director técnico de Boca Juniors. Con la mira puesta en el Mundial de Clubes, el experimentado estratega deberá tomar decisiones clave respecto al armado del plantel y los jugadores con los que contará para afrontar el desafío internacional y el calendario venidero.

Una de las primeras incógnitas a despejar es el futuro de Marcos Rojo. El defensor central no atraviesa su mejor momento en la relación con los hinchas y su contrato finaliza a fin de año, lo que generó especulaciones sobre su posible salida. Sin embargo, trascendió que Russo cuenta con Rojo para el torneo internacional y lo que venga después del mismo, dándole un voto de confianza.
Refuerzos a pedido: la prioridad es un delantero por banda

Miguel Ángel Russo ya se encuentra abocado al mercado de pases, incluso antes de asumir oficialmente en el Xeneize. Si bien Juan Román Riquelme, al frente del Consejo de Fútbol, ya trabaja en posibles refuerzos, hay un futbolista que busca por expreso pedido del próximo DT de Boca: Walter Mazzantti.

La prioridad de Russo para esta ventana de transferencias es incorporar un delantero que juegue por las bandas. Por ello, varios extremos figuran en la carpeta de Riquelme para el mes de junio, con el objetivo de cerrar una incorporación de estas características antes del Mundial de Clubes. La inclusión de Mazzantti en la órbita de Boca responde directamente al deseo del entrenador.

En cuanto a la defensa, nombres como Bruno Amione, Gonzalo Piovi y Marco Pellegrino ya están en el radar del Consejo de Fútbol, y será Russo quien establezca las prioridades para fortalecer la última línea. Para el mediocampo, los nombres que más gustan tanto a la dirigencia como al cuerpo técnico son Fausto Vera y Aníbal Moreno. En la delantera, además de Mazzantti, Jhon Emerson Córdoba y Marino Hinestroza también aparecen como opciones para reforzar el ataque Xeneize.

La llegada de Russo marca el inicio de una etapa de definiciones importantes en Boca, con la urgencia de conformar un equipo competitivo para los desafíos que se avecinan, especialmente el esperado Mundial de Clubes.