Este lunes en la mañana se produjo el deceso de la docente Mónica Jara, quien fue gravemente herida en la explosión ocurrida en la escuela 144 de Aguada San Roque hace dos semanas atrás.
El incidente ocurrió el 29 de junio pasado cuando trabajadores realizaban una tarea en un aula del colegio que estaba en construcción. En síntesis, por alguna causa que se investiga hubo una explosión que mató a dos trabajadores y dejó a Mónica Jara con el 90% del cuerpo quemado.
La maestra fue atendida, en principio, en el Castro Rendón y luego derivada a Mendoza a un hospital especializado en quemaduras y con terapia intensiva específica. No obstante, desde el centro médico se advirtió que la situación era compleja: "Tiene vía aérea comprometida, el pulmón comprometido, las quemaduras es en un 90% de la superficie corporal quemada, son profundas por lo cual es un gran quemado con lo que eso implica, más el compromiso de la vía aérea, más el compromiso del pulmón. El pulmón se ha comprometido, o sea se ha quemado, se está tratando de ventilar como se puede con lo que queda de pulmón", informó el 6 de julio pasado la doctora Roxana Cabrera, directora del hospital Lagomaggiore.