P_: ¿Está empantanado el conflicto docente?

MG_: No sé si está empantanado, está en una etapa compleja, complicada, porque es un tema absolutamente delicado el que se está discutiendo, que tiene que ver con derechos laborales que se han visto afectados por la por la sanción de la ley. Entonces, en ese marco estamos ante una ley con una votación importante, tuvo 25 votos, un poder ejecutivo que lo promulgó muy rápidamente, que después hizo una reglamentación, que esa reglamentación incluso fue cuestionada por los diputados que la sancionaron. Entonces, estamos en medio de un conflicto de dimensiones que hacen que tengamos una situación delicada, pero nosotros por nuestra parte creemos que estamos todavía con la fuerza suficiente como para poder seguir sosteniendo un reclamo que entendemos es justo porque evidentemente la decisión de la legislatura generó un conflicto que no teníamos y lo hizo sobre una sobra sin tener la información necesaria de lo que estaba resolviendo y generando una situación de la que hoy estamos todo inmersos.

P_: ¿Hay docentes que afirman que hay un grupo de patoteros de corbata con sueldo de 9 millones de pesos que les está tirando piedras?

MG_: Sí, claro que sí. Y sabemos quiénes son. En algunas expresiones pareciera ser personal y que tienen un encono hacia los trabajadores de la educación y hacia ATEN, que no es de ahora. Ahora tienen la oportunidad, en todo caso, por el lugar que ocupan, por el clima de época que hay también. Porque hay que decir esto, está en un contexto, donde a nivel nacional la libertad avanza, el PRO, todo lo que es la derecha Argentina está teniendo una avanzada muy fuerte sobre la educación. No solamente con ajustes en términos presupuestarios, sino también afectando el derecho de las trabajadoras y trabajadoras, sin ir más lejos, la media sanción de la declaración de esencialidad de la educación, porque viene en esa dirección. Así que claramente acá hay algunos que se han puesto ese traje y bueno, les queda muy bien.

P_: ¿Otra vez hubo descuentos masivos?
MG_: Si otra vez hemos tenido esa situación. Y bueno, esto también nosotros lo vamos a judicializar. De hecho, ya hemos presentado una medida por práctica antisindical que tiene una declaración de admisibilidad por la justicia laboral y que probablemente tenga consecuencias para el gobierno, porque se están metiendo en las planillas, se están metiendo en cargar información con una acción claramente persecutoria porque al ser de esta manera, sin información previa, sin nada, claramente eso los pone en un lugar de quien de manera desleal actúa como patronal ante un conflicto.
Eso esperemos que prospere, asimismo vamos a judicializar también los descuentos que se hayan producido, porque la práctica antisindical la hicimos antes. Ahora tenemos los descuentos en sí mismos, también eso lo vamos a judicializar con una ejecución por cobro de salario, que inclusive es una acción que esperamos que prospere porque es de la legislación laboral.
Y obviamente junto con eso, tenemos una iniciativa que la van a desarrollar cada compañero y compañera de nuestras seccionales para que desde las escuelas se realicen acciones solidarias para atender a aquellos compañeros y compañeras que tengan situaciones más delicadas ¿no? Fondo de huelga digamos, para generar un fondo de huelga. Exactamente, no es un fondo de huelga que pueda compensar lo que descontó la patronal porque es imposible, pero sí que de alguna manera pueda ayudar a aquellos compañeros que tengan situaciones más complejas y eso lo sabe mejor que nadie su escuela, los mismos compañeros que están con ellos.

P_: ¿Se empezó a sentir el desgaste por los descuentos de días de paro en el gremio entre los afiliados?
MG_: Mira, el tema de los descuentos claramente tiene un impacto, pero bueno nosotros vamos a trabajar para que encontremos las acciones necesarias, que no se pierda el eje de la discusión porque nos han tocado algo tan importante como es el salario. Así que sabemos que puede haber compañeros que ante esta situación, y por la situación económica en términos generales, no puedan aguantar por lo que significa en términos distorsivos, porque si no cobrás y obviamente eso termina teniendo un impacto. Ahora eso no merma la voluntad de lucha que tienen nuestras compañeras y compañeros para acompañar los reclamos que nosotros como conducción y de manera inteligente tenemos que pensar para que sigan siendo masivos. También estamos pensando en judicializar la ley, nosotros estamos evaluando también...

P_: ¿Qué llevarían?
MG_: Lo estamos evaluando con nuestro equipo.

P_: ¿Eso qué iría? ¿a la justicia laboral, digamos, por la modificación unilateral del Convenio Colectivo de Trabajo, una cosa por el estilo?
MG_: En realidad no, eso en principio sería por una acción de inconstitucionalidad que es una de las posibles acciones a llevar adelante, porque entendemos que la ley tiene visos de inconstitucionalidad por el trabajo incentivado, que lo prohíbe la Constitución en los artículos, creo que 37 o 38, porque aparte se atenta contra la estabilidad laboral, porque no se ha tenido en cuenta lo que es el derecho protectorio de lo que es lo laboral. Cuando tienen que hacer valer la ley más beneficiosa al trabajador y aquí esto no se ha tenido en cuenta, sobre todo en caso de lo suplente entonces esta es una cosa que estamos evaluando. Mañana en las asambleas lo vamos a plantear y seguramente vamos a ir en esa dirección como un complemento a nuestra lucha.

P_: Usted cuestionó la semana pasada el clima de violencia en las asambleas ¿cómo se va a manejar el tema en la asamblea que van a ser mañana de nuevo?
MG_: Hicimos un planteo que claramente apunta a que nuestros espacios de decisión y de resolución sean espacios donde podamos escuchar las distintas posiciones que tenemos. En algunos casos, eso es una situación que venía crescendo y que se estaba tomando como espacios muy hostiles para poder precisamente discutir temas tan complejos como el que estamos atravesando y donde es necesario que podamos escucharnos a los fines de poder tomar la decisión más acertada, porque por ahí, en esos ambientes resulta ser difícil tener espacios y tener la libertad o la tranquilidad o la tolerancia como para eso. Así que, eso estamos planteándolo en toda la provincia. Las últimas asambleas, se pudieron desarrollar sin inconveniente, esperemos que mañana vuelva a pasar lo mismo, porque en definitiva lo que tenemos que generar es el mejor espacio para que nuestros compañeros puedan elegir la mejor opción a los fines de lograr un objetivo que no hemos propuesto, que es que tengan un freno, estas iniciativas legislativas que atentan contra nuestros derechos.

P_: ¿Hay un sector radicalizado del interno, del sindicato, digamos?
MG_: Hay sectores, como pasa en cada conflicto, que piensan que las luchas son a todo o nada. Es decir, bueno, tengo que conseguir todo o si no, no consigo nada y eso es muy riesgoso porque en esas discusiones de todo nada, la nada es una derrota de una organización sindical que representa a más de 27.000 trabajadoras y trabajadores de la educación, que es la única organización docente de la provincia y que claramente tiene que estar fortalecida para esta y para las luchas que vienen. Entonces, para nosotros es muy importante tener siempre la organización fortalecida. Y la organización fortalecida a la que puede discutir, que puede entrar y salir de un conflicto con las asambleas numerosas, con muchos compañeros involucrados y llevando adelante la medida. Y hay otros compañeros que, por ahí, bueno, extreman las posiciones y hace que muchos empiecen a correr de la discusión. Y eso nos preocupa pero no se deja de ser, en todo caso, una expresión que tiene tanta legitimidad como la de otros en un espacio democrático como el de la Asamblea. Y en todo caso, ahí es donde se define la, o se toma la decisión final.