Un cabezazo de Paulo Díaz le dio el 1-0 en Córdoba sobre el final del encuentro. El equipo local jugó casi todo el segundo tiempo con uno menos. La vuelta será en una semana.
River Plate logró un triunfo trabajoso en la ida por los octavos de final de la Copa Conmebol Libertadores, un 1-0 con Talleres de Córdoba que lo dejó mejor parado de cara a la revancha que se jugará el miércoles 21 en el Más Monumental de Núñez.
El equipo dirigido por Marcelo Gallardo tuvo más oportunidades para vencer al arquero Guido Herrera, pero los de Walter Ribonetto también e incluso Matías Catalán convirtió un gol que luego le anularon por off side.
Luego del partido, Gallardo declaró: “No puedo pretender que el equipo funcione ya como yo quiero, sino no hay magia en esto… No soy mago, soy una persona que tiene una idea de trabajo y que trata de bajar una línea para que los jugadores la asimilen. Las condiciones tal vez no son las ideales para mí. Dije que me subí a un tren en marcha y tengo que ser inteligente, con mi cuerpo técnico, para saber qué es lo que queremos e intentar reconocer virtudes y defectos para potenciarlo”.
Ribonetto, por su parte, dijo: “Quiero felicitar a los jugadores por el esfuerzo que hicieron y de la manera que lo hicieron. Terminamos con un hombre menos y River no nos generó una situación de gol. Eso nos deja tranquilos y orgullosos de este equipo”.
Para el DT cordobés, “la serie está abierta más allá del resultado. Estuvimos a la altura del partido de ida. A nadie le gusta perder, pero estoy orgulloso de mis jugadores. Este grupo da la vida y muchas veces no se los reconoce. Estoy feliz de que nos defiendan de esta manera”.